A veces nuestra vida se parece a las plantas: hay temporadas que están vigorosas y florecidas, y otras, opacas y con hojas marchitas.
Tengo buenas noticias para darte hoy
A ti que crees que todo está seco y sin vida a tu alrededor hoy quiero decirte que vida puede florecer y ser renovada completamente.
Comprendo cómo te sientes, porque he estado ahí. Sin fuerzas, cansada de luchar contra molinos de viento, bajando los brazos al creer que nada cambiará. Pero este es sólo un sentimiento para superar, porque no has nacido para vivir en derrota.
El tiempo del desierto se terminó, la sequía llega a su fin. Jesús viene hoy hasta ti a decirte que te ama, y que todo lo que has vivido hasta aquí se ha terminado. Sólo deja que El habite en tu corazón, y créele a El.
El tiene planes maravillosos para tu vida que ni siquiera imaginas. Se ha terminado el luto, llega la hora de florecer y dar fruto.
El amor de Dios es ilimitado, y sus planes para ti son maravillosos. Así que te invito a mirar hacia arriba, a dejar atrás lo que estabas cargando sobre tus hombros porque Dios lleva toda carga en tu lugar.
Abre tu corazón, da un paso de fe, tu vida puede florecer con bellos colores y dar un giro sorprenderte. Sólo tienes que creer.